Exhausto de amor

Exhausto de amor

Pasaron los tiempos

buscando el amor,

busque la arrogante libertad,

deseando momentos, pasión,

para poder vivir, soñar,

deseos intensos, y bellos,

que no podía encontrar.

Pensé que no habría posibilidad

de que de amor me llenara,

que de sentimientos

exhausto quedara,

y llego la quimera

de una lejana tierra,

que me lleno la pradera,

de flores, y piedras.

Se endureció la roca

que habitaba en el rosal,

y como alazán que desboca

hizo erupción el volcán,

corrió lava encendida

desde su cima, por la ladera,

y allá lejos mientras tanto

era…era primavera.

Risa, murmullo, intensa mirada,

que con un movimiento,

ilumino la alborada

con nuevos alientos,

mientras lejos el viejo volcán

repetía cada vez su erupción,

hasta que de placer, y celo

quedo exhausto de amor.

Autor: José Prado

@Derechos reservados por el autor

Casas, recuerdos, y horas

Casas, recuerdos, y horas.

Casas coloniales

de tiempos de la conquista,

balcones adornados

con tu cara, y tu sonrisa,

paisaje que sin querer,

es el homenaje sublime,

que gloria imprime

a un nombre de mujer.

Salteadas nubes viajeras

pasearon por el cielo,

como mensajeras

de tu curioso desvelo,

temperamento mezclado

de razas indómitas,

que crearon una figura,

sensual, y exótica.

Casas coloniales embargan

el recuerdo de tu tiempo,

en ojos que reflejan

la fortaleza del viento,

belleza que no pierden,

su candor, tampoco aminoran,

casas coloniales llenas,

llenas… de recuerdos, y horas.

Autor: José Prado

@Derechos reservados por el autor

Tabues rotos

Tabúes rotos

Noche de risas, sin penas

de pasiones a granel,

de encendidas escenas,

sin acuarelas, ni pincel,

momentos sin descripción,

que en una noche,

llenaron el mundo de color,

y susurro con derroche.

Cercas saltadas sin temor,

risas, que en un cantar,

llenaron tu boca

de regocijo y soñar,

se olvidaron las penas

se lleno de sabor,

la vida que antes era triste,

y llena de desamor.

Noche de tabúes rotos,

de entereza y candor,

noche de querellas

acompañadas del olor,

de ese olor que resume,

y que al corazón libera,

con el sentimiento hermoso

de libertad, serena.

Autor: José Prado

@Derechos reservados por el autor 

Fuego de estrellas

Fuego de estrellas.

Fuego de estrellas nació,
cuando tu cuerpo y el mío,
en un éxtasis de pasión,
quemaron el hastío;
crecieron las hogueras,
se quemaron estancias,
cuando en un rito de ardor,
consumamos nuestras ansias.

Se alumbró el infinito,
con el deseo total,
de dos almas que desean,
el amar por igual,
y como fuego de estrellas,
que calientan el universo,
se fundieron nuestros cuerpos,
en un ardiente lamento.

Se movieron las galaxias,
grito el trueno ensordecedor,
porque tu y yo habíamos,
habíamos hecho el amor,
y luego en una calma letal,
entre caricias, y besos,
como cualquier mortal,
dormimos nuestro embeleso.

Luego al despertar del sueño,
te volví a mirar,
atravesó mi alma un deseo,
que era sin igual;
te acaricie el pelo,
antes de tus labios besar,
de nuevo fuego en las estrellas,
pues nos volvimos a amar.

Autor: José Prado
@Derechos reservados por el autor

USA

Esperanza

Esperanza

Mujer de recuerdos dolidos,

que lloras con la añoranza,

de tu cuerpo que crees perdido,

mutilada tu arrogancia,

con tristeza, y con dolor,

piensas en tiempos de antaño,

cuando tú figura completa,

no marcaban enfermedad, y años.

Tu alma siempre valiente,

doblego esta vez su entereza,

perdiste de tu cuerpo,

la prueba de tu belleza,

pues para proteger tu vida,

entregaste esta señal,

que muestra a algunos hombres,

que es belleza, y feminidad.

Lloraste la impotencia,

rebelándote al dolor,

mujer que entregaste,

tus senos, para salvar amor,

levanta pues la cabeza,

deja ya de llorar,

llena tu corazón de esperanza,

vuelve a vivir, y amar.

No malinterpretes la belleza,

vive con corazón pleno,

pues en tu naturaleza,

la belleza no eran tus senos,

dale gracias a Dios por que llenos,

de amor, y dulzura esta tu vida,

cuídate con fortaleza, sin medida,

para los que te queremos, y somos buenos.

Autor: José Prado

@Derechos reservados por el autor

USA

Te he encontrado

Te he encontrado

Pasó mucho tiempo,

antes que mi búsqueda,

tuviera la lucida frescura,

y sonido, del viento,

paso tanto, tanto tiempo,

de soledad, y dolor,

que pensé no volvería,

a mi vida, el amor.

De pronto como en una visión,

te encontraron mis ojos,

apareció: tu vida, y candor,

que dan los sueños de pasión,

y sentí de nuevo el calor,

los deseos enamorados,

todo, todo porque el amor,

al fin había llegado.

Sentí la gran felicidad,

que darme tú puedes,

y supe de ti entonces,

que quiero te quedes,

que cubran mi alfombra,

las pisadas de tus pies,

porque no puedo mentirte,

yo a ti, te amo mujer.

Autor: José Prado

@Derechos reservados por el autor

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Entre mi sexo y mi piel

Entre mi sexo, y mi piel

Entre el sexo, y mi piel esta mi vida,

entre la vida, y la razón, mi corazón,

entre tus besos, y los míos,

hay todo un río de sangre, y pasión,

y nadando entre sus aguas,

el deseo ese, que no puede delinquir,

porque esta lleno de sueños,

y de ganas… ganas de vivir.

Entre mi sexo y mi piel, vive dormida,

el alma de mi poesía,

que sueña, ama, y siente,

perdida en tu recuerdo cada día,

vuela alto, tan alto,

que las águilas al volar,

circulan formando corazones,

para que te pueda regalar.

Entre mi sexo, y mis anhelos,

cubierta con tu piel,

están todos los desvelos,

de tu corazón, que me hace bien,

y entregado a tu cuerpo,

en alma, mente, y corazón,

se envuelve mi vida,

en un mar de ilusión.

Busco tus ojos al amanecer,

busco tus manos, en mi cuerpo,

siento que sin ti, es un desierto,

mi gana de querer,

porque sin tus amores,

sin tu mirada de miel,

se queda vacío mi deseo,

entre mi sexo, y mi piel.

Autor: José Prado

@Derechos reservados por el autor

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Cancion

Canción.

Risa que hace temblar la tierra,

sentimientos a flor de piel,

que creo la naturaleza,

con sufrir y con querer;

reina de cuerpo esbelto

de no muy alta en estatura,

pero dueña de los poderes,

del amor, y la dulzura.

Pechos amplios, e insipientes,

que con un nítido vibrar,

llenan los ojos, de la simiente,

del deseo por amar,

piernas mágicas bases,

para tu ambiguo caminar,

que despedazan la mente

del hombre con tu andar.

Reina de amores intensos

de etéreos amaneceres,

que llenaron a cuantos hombres

de inquietos menesteres,

yo poeta de pueblo,

de sentir, y de querer,

pongo en mi poema los sueños,

que inspira una mujer.

Por eso escribo… siento,

por eso ha llegado a existir,

la rima de los vientos,

del querer, y del vivir,

llego en grande la inspiración

fuerte como la tormenta,

que derrama en canción,

esta rima tan intensa.

Autor: José Prado

@Derechos reservados por el autor.

El amor a tu forma

El amor a tu forma

Todo comienza suavemente
con un beso que enciende,
un murmullo de amor
que corre por mi mente.

Se expande mi pecho
y entonces sin pensar,
un río de roja sangre
hace mi corazón hinchar.

Luego un toque atrevido
que te hace suspirar,
que es por demás repetido
para que puedas gozar.

Que pretencioso y bello
es lograr hacerte sentir,
saber que eres el destello
que hoy me hace vivir.

Mi dueña preciosa
mi reina, única, y  total,
manda tú mi diosa
y yo complaceré tu soñar.

Autor: José Prado
@Derechos reservados por el autor

Foto tomada de FB

Inocencia

Inocencia

Nacimiento de un río, frescura total,

edad perfecta, para vivir, y soñar;

límpida mirada, sin pecado mortal,

belleza amada, pureza sin igual.

Mujer que enloqueces, con tú ternura

eres la pura inocencia del vivir;

olvidé locos deseos, también mí sentir,

partí, olvidé toda tú hermosura.

Juventud inmensa, fresca la presencia

que juzgaba mí ardor, deseo inusual,

mirándote, casquivano, triste mortal.

Con sensual extrema, pura insolencia,

llena estabas de linda inocencia,

y no quedó más, que ponerme a llorar.

Autor: José Prado

@Derechos reservados por el autor

Por que?

¿Por que?

¿Porque cantar a solas?

¿Porque hablar de naufragar?

si las olas nos respetan,

si la vida es navegar,

¿Por que sentir miedo?

¿Por qué no ser feliz, y cantar?

si los gorriones lo hacen,

día, a día sin parar,

si entre nubes negras,

siempre un rayo de luz se cuela,

si pasa el fuerte huracán,

pero el tiempo borra sus secuelas;

si nos alegra vivir amando,

¿porque andar a solas?

seamos amantes felices,

amémonos, a todas horas;

Que amanezca el día

entre arrullo, y besos,

y que al atardecer,

entre tus brazos yo preso,

me pueda yo sostener;

y entre marinas olas,

al acabar el anochecer,

ser de nuevo tú aurora,

mi linda mujer, llega ahora,

porque en mis madrugadas,

a mí lado quiero tener,

a la amante más hermosa,

hembra que todos quisieran ver,

llega mujer, llega ahora,

deja que pueda estar, y ser,

el hombre feliz que te añora.

Autor: José Prado

@Derechos reservados por el autor

Bajo Las sabanas

Bajo las sabanas

Bajo las sabanas blancas,

que atestiguaron nuestro amor,

quedaron los restos

de mi poder, y mi ambición,

bajo la presión inhóspita

de tus manos aferradas,

quedo la fiereza de mi mente,

en tu sexo aprisionada.

Bajo las sabanas blancas

que rozaron nuestra piel,

quedaron los murmullos,

de tu risa de cascabel,

con ilusiones, y deseos,

con pasión cultivada,

quedo todo guardado

entre sabanas, y almohadas.

Y hoy recordando

tu sentir, y mi pasión,

se mojaron los envases,

se derramo, el corazón;

y mirando tus ojazos verdes,

y mi suave pelo de canas,

ya no guardo mis secretos

aquellos entre mis sabanas.

Autor: José Prado

@Derechos reservados por el autor

Fragata de guerra

Fragata de guerra

Mire tu cuerpo desnudo

ávido de calor,

desplegado, navío listo

para la Guerra del amor;

admire la curvatura,

que me daba la ilusión,

de un luminoso espejismo

regalado por Dios.

Mire el color de las estrellas,

en tus muslos recogidos,

y entre ellos un diamante

se hallaba bien escondido,

tesoro de un barco pirata

con bandera de piel,

dos cañones apuntaban

directo…directo a mi sien.

Mire tu cuerpo desnudo

deseo lleno mi ser,

elevándose un muro

de sentimiento, y mujer;

bello amanecer sentido

con sonido de canción;

tu cuerpo lindo desnudo,

ante mis ojos sin pudor.

Belleza ignorada, desconocida,

que al fin se dejo ver,

con la sencillez desinhibida,

en tu cuerpo de niña, mujer;

fragata de guerra, artillada,

¿Cómo podré estar seguro?

De resistir la andanada

de tu cuerpo… tu cuerpo desnudo.

Autor: José Prado

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Si pudiera un dia

Si pudiera un día

Si pudiera hacerte feliz

si en mis manos estuviera,

el que tuvieras tu amor,

en esta primavera.

Si las noches que tengo

se llenaran de caricias,

y pudiera poco a poco

robarte tus delicias.

Si pudiera volar a tu lado

quedarme contigo todo el día,

a tu cuerpo acurrucado

hasta que llegara el mediodía,

Si lograra por fin tomar

de tu boca un beso,

que dejara mi corazón

en el tuyo muy preso.

Seria feliz entonces

porque habría razón,

para la felicidad

en mi triste corazón.

Autor: José Prado

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Error

Error

Pasaron años antes de realizar,

que mi Corazón estaba resentido,

porque supe lo que había sentido,

otro ser por la traición,

se me rompió el Corazón

de solo pensar en el dolor,

que cause por darle paso

al calor de la pasión.

Ahora solo quiero entender

mi Dios sabio y querido,

porque no he podido,

olvidar aquel amor;

¿por que me atormenta el desamor?

que a otro ser cause,

y no hallo respuesta, ni perdón,

porque mi culpa yo se.

Sigo amando a aquel ser

con este sentir profundo,

y llevo agrio por el mundo

la tristeza y el querer;

triste agonía puedo ver

en este corazón atormentado,

no se si Dios ha perdonado

mi pecado del placer.

Pienso yo poeta del tiempo,

que debes esperar con paciencia,

que si fue tuya la esencia

de ese tan grande amor;

volverá a ti con el ardor,

de aquel tiempo apasionado,

y sabrás que Dios ha perdonado

la crudeza de tu error.

Autor: José Prado

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