Sexo y almohada.
Anoche soñé contigo,
en mi casa estabas,
vestida… vestida de seda,
sensual mujer excitada,
fue como un accidente,
que envolvió mi mirada,
en un deseo envolvente,
de sexo, y almohada.
Te acercaste provocando,
tanta cantidad de cosas,
yo te besé en los labios,
que eran suaves como rosas,
sentí entonces tu aliento,
era su aroma perfecto,
y todo mi cuerpo y mi mente,
ellos se hallaban erectos.
Cerré mis ojos al besarte,
como en entrega total,
y sentí que al tocarte,
yo… yo te volvía a amar,
tu cuerpo estaba caliente,
porque él era de fuego,
ese que quema la pradera,
y que al mirarlo, te deja ciego.
Y en el éxtasis de amor,
cuando tu cuerpo tomaba,
me traiciono mi mente,
que despertó en la almohada,
mojada por el sudor,
de una pasión de sueños,
que se esfumo con tu figura,
en humo… humo de ensueños.
Autor: José Prado
@Derechos reservados por el autor
USA
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