Sensual molestar

Sensual molestar

Un deseo te ata, al pensar,
y a las ganas inmensas,
de carretera extensas,
de sexo, y ardor caminar,
y allá en la oscura soledad,
de tu habitación cerrada,
das riendas suelta a la cascada,
de tu sensual molestar.

Es un recuerdo mudo,
pero sientes hervir tu vientre,
y dentro de tu mente,
estoy a tu lado, desnudo,
tus manos bajan suavemente,
como en una caricia de mí amor,
y cierras los ojos sin temor,
estas conmigo de repente.

Sientes los besos de mi boca,
tiemblas ante las caricias divinas,
pues sientes que se originan,
desde mí cuerpo, que ahora te toca,
imaginas entonces el temblor,
de mi cuerpo al poseerte,
y de pronto se abre la fuente,
incontrolable de tu pasión.

Mojas tus muslos, eres dichosa,
con el elixir de tu sexo ardiente,
se vuelve loca ahora tu mente,
y gritas tu orgasmo de diosa,
luego ya, tu rostro calmado,
tratas de ocultar tu desvelo,
pero en tus ojos, leo el deseo,
y se que en secreto, me has amado.

Autor: José Prado
@Derechos reservados por el autor
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