Mujer mariposa
Ayer pensé
en la imperiosa,
Crisálida,
tosca, naciente,
que cambia
de oruga repelente,
a una
esplendida mariposa,
y pensé en
ti mujer,
pensé en
como eras,
con esas
tiernas maneras,
como logré,
lo que logré.
Pensé que
esta criatura,
para
alcanzar la belleza,
ella sufre
con crudeza,
el cambio
de su figura,
sentí que
eres mariposa,
además de
ser mujer,
porque para
mi, tu querer,
fue
conquista rigurosa.
Y hoy, ya
muy cambiada,
de forma, y
manera,
eres bella
compañera,
por mi cuerpo
liberada,
ya ahora en
la alborada,
antes
tensa, y tenebrosa,
hay una
mujer mariposa,
bella,
dulce, y enamorada.
Autor: José Prado
@Derechos reservados por el autor
USA
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