Torres gemelas para el amor
Una vez miré, muslos hermosos,
eran recios, como pedestales,
esos que sostienen ventanales,
estructuras de un porte precioso,
blanca piel, como marfil valioso,
fuertes, como tormentas tropicales.
Eran como aquellas torres gemelas,
que una vez adornaron a Nueva York,
ellos solos, adornan con valor,
dando hermosura con primaveras,
y por ahí, bordeando sus riveras,
anda escondida la pasión.
Torres gemelas, recias pisadas,
de aquel baluarte del amor,
cuerpo hecho por un escultor,
para vivir madrugadas,
mujer sexual, y apasionada,
con recias carnes, gracias a Dios.
Autor: José Prado
@Derechos reservados por el autor
USA
No comments:
Post a Comment