Eclipse de amor
Sola… en la tarde marcada,
por aquel eclipse solar,
tu tierna alma enamorada,
tenía en la boca, sabor de mar.
Esperando la alborada,
sin ni siquiera pensar,
te envuelve la madrugada,
con sus locas, ganas de amar.
De rodillas, maltratada,
está tú alma derrotada,
sin un te quiero, sin un cantar.
Y tú aguardas mascarada,
teatral obra dislocada,
que te haga poder olvidar.
Autor: José Prado
@Derechos reservados por el autor
USA
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