De ayer a hoy

De ayer a hoy

Ayer cuando te fuiste,

me quedé tan solo,

se fue de mi corazón un trozo,

de mi tierra, de ella un polo,

sentí una nostalgia distinta,

que arruinó mi todo.

Ayer cuando te fuiste, vagó mi alma,

atada a una braga ardiente,

estaba seca, la antes airosa palma,

todo era tan, tan diferente,

se había ido toda la calma,

que una vez tuvo mi mente.

Recordé mi triste despedida,

me traté de consolar,

pero el dolor no tenía medida,

y menos aún tenia final,

porque el amor de una vida,

no… no es fácil de olvidar.

Pero llegó el amigo tiempo,

y con inmensa razón,

me dijo: Espera al viento,

el te traerá nueva ilusión,

confía en mí, yo lo siento,

regresará de nuevo el amor.

Dormí mucho, profundo y quieto,

y al de pronto despertar,

rápido había pasado el tiempo,

volví también a suspirar,

me di cuenta, que había sido tonto,

porque mi alma… ella volvió a amar.

Autor: José Prado

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