Esfinge.
Soñé una esfinge dorada,
como si el viento del mar,
la trajera en espuma bordada,
con blancos granos de sal,
de verde esmeralda la mirada,
dorada su cabellera de coral.
En mi sueño me mirabas,
con una mirada de ansiedad,
tu cuerpo, libertad ansiaba,
simple y bella heredad,
querías que yo te mirara,
aunque fuera en brevedad.
Tu cuerpo era un cataclismo,
poderoso como un huracán,
pero tu mirada en mi espejismo,
era fuego, como lava de volcán,
con ese reflejo verde, el mismo,
que yo no me podía explicar.
Cuando en mi sueño alocado,
la lava casi llegaba al mar,
abrí mis ojos asombrados,
vi tu cabellera de coral,
y en tu cuerpo enamorado,
esmeralda, fuego, oro, y sal.
Autor: José Prado
@Derechos reservados por el autor
USA
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