Piel de miel.
Dorado sol que ilumina,
en cada amanecer,
el recuerdo de tus besos,
y el calor de tu piel.
Nace como la neblina,
que cubre el amanecer,
bajando de las colina,
tu recuerdo mujer.
Dorada piel encandilada,
por los rayos del astro rey,
es tu piel tan dorada,
como un panal de miel.
Pasa la primavera,
el verano también,
pasado el otoño y el invierno,
sigue tu color de piel.
Te cambiaré el nombre,
tu cabello peinaré,
y te llamaré en susurro,
te llamaré… piel de miel.
Pues vivo enamorado,
de la tonada que una vez,
hizo posar mis ojos,
en tu linda piel de miel.
Autor: José Prado
@Derechos reservados por el autor
USA
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