Recuerdo lejano
Del sabor de tus labios,
de nuestro tiempo de amor,
de los lindos recuerdos
que tengo de tu corazón;
guardaré con cuidado,
en total armonía,
tu voz y tu cuerpo,
nuestros minutos y días.
Te tendré colocada
en mi pedestal,
como obra maestra
de inmensa beldad;
y contaré ese tiempo,
que me hace soñar,
por no tenerte a mi lado,
y tu boca poder besar.
Recordaré las caricias,
y quizás un día veras,
que se repiten de nuevo,
en nuestra realidad;
porque los agravios
de esta mi soledad,
pueden aliviarlos tus labios,
hasta… hasta la saciedad.
Autor: José Prado
@Derechos reservados por el autor
USA
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